Cosas que hacer para recuperar la forma tras los excesos de Navidad

frutas y verduras
Aún estamos inmersos en las vacaciones de Navidad pero en el futuro inmediato sólo resta la fiesta de Reyes Magos que está diseñada a medida de los pequeños y donde los excesos culinarios son inapreciables. Ya hemos pasado "lo gordo" y cabe planificar lo qué debemos hacer para recuperar la forma física y los hábitos saludables. 
Para que no penséis que predico sin dar ejemplo cabe decir que he engordado un kilo en la última semana y ahora peso 77 Kg. Pero no estoy nada preocupado. Hace cuatro años pesaba 102 Kg y conseguí rebajar 26 Kg en algo más de un año sin cirugías ni dietas extenuantes. Desde entonces y con un método muy simple consigo rebajar cualquier repunte de peso en pocas semanas. Hoy en día puedo decir que mi peso se ha estabilizado en 76-77 Kg que son los adecuados para mi talla. Si adelgazo, el poco tiempo mi cuerpo recupera el peso ideal. Si engordo, en pocas semanas regreso a los 76 Kg. Como de casi todo y no me gasto ni un euro en pastillas o elixires mágicos que me temo tienen una dudosa eficacia.

    adelgazar despues de Navidad
  1.  He visto los días de Navidad y Año Nuevo a muchos que practicaban jogging a última hora del día, supongo que con la esperanza de quemar las grasas que habían consumido durante el día. Aunque no tengo nada en contra de hacer ejercicio físico es preferible la regularidad del mismo que intentar quemar calorías de forma rápida. Se consigue perder peso de forma rápida pero sobretodo por la pérdida de líquidos. Una vez repuestos el peso vuelve a ser casi idéntico. Por eso para recuperar la forma lo mejor es hacer ejercicio moderado y constante - aparcar el vehículo y realizar los trayectos medios a pie - y de vez en cuando realizar ejercicio más fuerte - correr, nadar, pesas - que es más adecuado para el bienestar del corazón que para perder peso. Es decir, para perder peso lo mejor es la constancia del camina, mientras que para la salud del corazón un buen sprint de vez en cuando es perfecto. Personalmente siempre voy caminando a cualquier sitio que se halle a menos de 2 Km de distancia.
  2. Debemos hacer desayunos completos que incluyan zumos de fruta naturales o fruta, cereales - pero NO cereales azucarados - como pueden ser tostadas de pan integral, alguna grasa como por ejemplo bacon y mantequilla - sí, habéis oído bien, el bacon y la mantequilla no están prohibidos - y algún lacteo NO AZUCARADO. Los almuerzos han de ser sobrios y completos, y las cenas simplemente no se hacen. O si se hacen COMO MUY TARDE A LAS 18 HORAS. De esta manera nos aseguramos que estaremos en ayunas durante bastante tiempo pero al estar dormidos gran parte de dicho tiempo será más soportable. Entre comidas, si van a transcurrir más de tres horas, podemos comer algo de fruta o un lácteo descremado. Hacer un desayuno copioso es fundamental, ya que entonces encaramos el almuerzo con menos apetito.
  3. NADA DE AZÚCAR. Este sí que es un ingrediente prohibido. El azúcar no sólo aporta calorías vacías, sino que además impide que adelgacemos. Es un problema que padecí durante cierto tiempo. Era incapaz de bajar de los 80 Kg aunque mi dieta era hipocalórica. No entendía qué pasaba.  Hasta que me fijé que mi ingesta de azúcar continuaba siendo alta. Tomaba azúcar con los zumos, con las bebidas refrescantes, incluso con algunos productos que en principio no deberían estar azucarados como el tomate triturado de lata o las patatas fritas congeladas. Para evitar tomar azúcar leía con detenimiento la composición de los alimentos y sobretodo eliminé totalmente bebidas refrescantes azucaradas y los zumos de fruta que no fueran naturales. Pues bien, en apenas cuatro semanas llegué a los 76 Kg cuando en un año había sido incapaz de bajar de los 80.
  4. También eliminé las bebidas edulcoradas. Cierto que los edulcorantes aportan poca o ninguna caloría pero aumentan el apetito y pueden tener efectos secundarios como ser laxantes, con lo que destruyen la flora bacteriana. Por si no lo sabéis, en las granjas de engorde animal se incluyen en la dieta edulcorantes para que el ganado coma más y engorde antes. 
  5. Hay que comer mucha fruta y verdura. Todos los postres y las comidas entre comidas han de ser fruta, y comer mucha verdura cruda en ensaladas o bien cocinada. No se trata de aquello tan manido de que hay que comer fruta y verdura porque aportan minerales y vitaminas, sino por algo que recientemente se ha descubierto : las bacterias que residen en nuestro intestino y que se encargan de ayudarnos a digerir los alimentos SON MÁS EFICACES SI NUESTRA DIETA ES RICA EN VERDURAS Y FRUTA. Si coméis mucha fruta y elimináis lácteos en los postres alcanzaréis la situación en que me encuentro, que por mucho que coma no consigo engordar o lo hago tan poco que en sólo unos días regreso a mi peso habitual. Aquellas personas que admiramos y que son tan infrecuentes por aquello de que comen lo que quieren sin engordar deben su don a la herencia genética pero también a unas bacterias de su intestino mucho más eficaces.
  6. No existen dietas depurativas ni alimentos que nos ayuden a disolver las grasas. No os lancéis a hacer dietas que en la mayoría de los casos provocan serios deficits nutricionales y que tal vez hacen perder peso de manera momentánea pero que tienen un efecto rebote : en cuanto dejéis de hacer una dieta muy restrictiva aumentaréis de peso. Tampoco os fijéis una meta temporal para reducir peso. Ni una semana, ni un mes ni lo que sea. Bajaréis de peso de forma gradual y a menudo sin daros cuenta, simplemente llevando una alimentación no restrictiva pero sana. Si al cabo del tiempo queréis volver a cenar hacedlo con moderación y comiendo muy ligero, mejor a las 8 de la noche que a las 10.
  7. Cuando vuestro cuerpo coma con moderación, no tengáis hambre, estéis satisfechos con lo que coméis y además se mantenga en su peso, sin repuntes ni bajadas, entonces habréis alcanzado un punto de estabilidad del cual no será fácil moverse. No penséis en el peso que os gustaría tener, sino en el peso real que vuestro cuerpo acepta. Y es posible que antes de alcanzar ese peso que por vuestra talla y edad deberiáis tener tengáis pesos ideales intermedios durante mucho tiempo. Digamos que una dieta no es algo que imponemos por un tiempo, sino un modo de comer y vivir de por vida y que los resultados a veces se obtienen a muy largo plazo.

Ver anterior artículos sobre las DIETAS PROTEICAS