Tartare de salmón ahumado o fresco

Si estáis buscando un entrante especial y muy aparente, el tartar de salmón ahumado es vuestra receta. Realmente no se puede decir que sea tartar a menos que se emplee salmón fresco (que es el tipo que se emplea realmente), pero con salmón ahumado estáis seguros que a todo el mundo gustará.

INGREDIENTES (4 personas) :

400 gramos de salmón ahumado (o fresco,,,si os atrevéis)
Medio vaso (100 ml) de salsa Worcestershire
Un vaso (200 ml) de salsa tabasco
Medio vaso (100 ml) e mostaza francesa "fuerte"
Medio vaso de cava o champaña o vino blanco
1 chalota
1 cebolla tierna pequeña
Una docena de cebolletas en vinagre
Una docena de pepinillos en vinagre
Sal marina
Cebollino

En un bol mezclamos todas las salsas y el cava, la cebolla y la chalota ralladas, así como las cebolletas y los pepinillos picados y un poco de sal marina.

Cortamos el salmón ahumado en trozos pequeños (de un centímetro de lado) y lo introducimos en la mezcla del bol. Dejamos macerar durante una hora, aproximadamente.

Transcurrido el tiempo pasamos la mezcla por un colador de manera que se elimine prácticamente todo el líquido. Introducimos el tartar en moldes (son pequeños aros metálicos, similares a los que se emplean en las servilletas) directamente sobre el plato de los comensales y los levantamos con cuidado para que no pierdan la forma. También podéis improvisar los moldes con pequeñas cazuelas de barro que rellenáis para luego darles la vuelta.

Se sirve con tostadas o crackers y un poco de mantequilla, además de espolvoreando por encima un poco de cebollino picado. La preparación con salmón fresco es idéntica sólo que se suele dejar un poco más de tiempo en maceración.